Los Leprosos Acuden a Jesús
ESTUDIO # 9
LOS LEPROSOS ACUDEN A JESÚS
OBJETIVOS.
- Saber que Dios tiene poder para sanar.
- Conocer el sufrimiento de los enfermos.
- Entender que Dios sí quiere sanar a los enfermos.
- Apreciar que sólo Dios tiene poder para perdonar los pecados
::ANTECEDENTE::
La lepra era una de las enfermedades más terribles en la antigüedad. Comenzaba por unas ulcerillas en la piel que iban invadiendo todo el cuerpo; primero picaban mucho pero después dejaban de doler y la carne se iba cayendo.
El hombre que pensaba que tenía lepra debía ir a que el sacerdote lo comprobase; éste le hacía volver al cabo de unos 40 días y confirmaba si tenía lepra o no la tenían. Como la lepra en aquella época no podía curarse y era muy contagiosa, el enfermo era expulsado de su casa, de su pueblo y todas sus pertenencias quemadas. Se iba a vivir en cuevas con otros leprosos y salían a los caminos a pedir. Nadie se acercaba a ellos sino que desde lejos les arrojaban las monedas.
Los leprosos tenían la obligación de gritar cuando alguien se acercaba “inmundo” para advertir de su estado y de mover unas carracas que producían ruido. Con ello aquellos que no les habían visto bien podían alejarse con prontitud.
Su situación no podía ser más desesperada; obligados a salir de su medio, sin poder trabajar, sin poder relacionarse con nadie sano, vagaban sin esperanza de pueblo en pueblo mendigando un poco de comida.
REFLEXIÓN
¿Das gracias a Dios cada día por la salud?
LECTURA BÍBLICA:
Lucas 5:12-16; Lucas 17:11-19
::TEXTO PARA APRENDER::
Señor si quieres puedes limpiarme. (Lucas 5: 15)
Tu fe te ha salvado (Lucas 17:19)
HISTORIA BÍBLICA
La primera historia muestra a un hombre lleno de lepra; seguramente había oído hablar de Jesús y por eso le esperaba. Cuando lo vio corrió antes de que nadie lo detuviese y se arrojó a sus pies, con el rostro en tierra; ningún otro gesto podía dar más muestra de sumisión y humildad. Jesús lo mira y espera. El hombre sollozando le dice:
“Señor, si quieres puedes limpiarme”;
Apenas alza sus ojos del suelo esperando la aceptación o el rechazo; Jesús es su única oportunidad.
Entonces Jesús habla: “Quiero, se limpio” y ¡Oh maravilla!, al instante el hombre nota que está limpio.
– “Ve y muéstrate al sacerdote y no le cuentes a nadie lo que ha pasado, dijo Jesús”.
Pero el hombre una vez que le confirmaron que estaba totalmente sano, no pudo callarse y lo contó a quien le quiso oír. ¿Cómo iba a callarse, si ahora podía de nuevo integrarse en la vida normal, volver a su pueblo, volver a su casa. Y todos los que oían querían conocer a Jesús.
La fama de Jesús y el poder que emanaba de Él se iba haciendo más y más grande, de tal manera que siempre estaba rodeado de gente
Pasado el tiempo otros leprosos se acercaron a Jesús. Ahora eran ya diez. Iban juntos por los caminos tocando sus campanillas y señalando que eran inmundos; al ver a Jesús se pararon lejos porque sabían que no les estaba permitido acercarse y alzando su voz dijeron:
– “¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros!”.
Jesús les vio, y les dijo que fueran a ver a los sacerdotes para que examinaran sus cuerpos, como era preceptivo, y ellos obedecieron; mientras iban fueron sanados. Sus cuerpos están limpios, libres de la terrible plaga que era la lepra. Uno de ellos volvió muy contento a darle las gracias a Jesús; y se postró en tierra a sus pieslleno e gratitud; éste era samaritano, un pueblo nada querido por los judíos.
Y Jesús al ver que sólo había vuelto el extranjero le dio un regalo aún mayor ya que le dijo:
–“levántate, tu fe te ha salvado”.
A los diez les dio la sanidad física; ya podían hacer vida normal, trabajar, vivir en sus pueblos, estar con su familia, pero al samaritano le dio algo mucho mayor: la
sanidad espiritual y con ella la llave para entrar por la gracia de Jesucristo en el cielo. Habría que resaltar en estas dos historias varios aspectos que animaron a Cristo a sanarlos:
- Todos eran hombres necesitados.
- Todos estaban desahuciados de los demás hombres.
- Se acercaron a Jesús sin importarles las normas establecidas (que les prohibían acercarse a los hombres sanos.
- Mostraron su humildad arrodillándose ante Jesús o alzando su voz pidiendo por su necesidad.
- Al menos dos se mostraron muy agradecidos, el que fue sanado independientemente y el que volvió a dar las gracias.
REFLEXIÓN:
Debemos contarle a Dios todas nuestras necesidades en oración y cuando sean respondidas dar las gracias. E, incluso, dar gracias porque Dios nos escucha aunque no responda como nosotros queremos.
ACTIVIDADES:
1. Completar la historia
Un día se acercó a Jesús _______ (uno, cuatro, tres) leproso. Este se ________________ (echó a sus pies, se arrodilló, se puso delante de él) y le dijo: Señor si _____________ (quieres, gustas, te importa) puedes _______________ (sanarme, limpiarme, curarme). El Señor dijo: ___________________ (no me apetece, pero no me importa, quiero) ___________ se limpio. Y al instante desapareció la lepra. Tiempo después fueron ________ (12, 7, 10) leprosos los que se acercaron a ___________ (Jerusalén, al templo, a Jesús) y gritaban: Jesús, ten ____________ de nosotros (pena, misericordia, caridad de nosotros). Jesús les dijo: Id y como manda la ley _________________ (pedidle a los sacerdotes, presentaos a los sacerdotes, lavaos en el estanque de Siloe). Y ellos fueron y los _______________ (sacerdotes, amigos, familiares) declararon que estaban ___________________ (sanos, leprosos, mejorados). Entonces uno ellos, que era ___________________ (judío, samaritano, más pobre) fue a buscar a Jesús- Cuando éste le vio le dijo: ¿dónde están los otros, estáis curados todos, quién eres tu de los diez? ) _____________________________ . Jesús le dio entonces un regalo mayor:___________________________
2- Encontrar enfermedades frecuentes en la antigüedad.
TIFUS, TOSFERINA, POLIO, LEPRA, VIRUELA, PESTE, CEGUERA
3.- Sustituye por sus números:
1-A; 2-B; 3-C; 4-D; 5-E; 6-F;
7-G; 8-H; 9-I; 10-J; 11-K; 12-L;
13-M; 14-N; 15-Ñ; 16-O; 17-P; 18-Q;
19-R; 20-S; 21-T; 22-U; 23-V; 24-W;
25-X; 26-Y; 27-Z
________________ ___________ ______
2.5.14.4.9.3.5 1.12.13.1 13.9.1
___ _________________ ___ ____________
1 10.5.8.16.23.1, 26 2.5.14.4.9.7.1
______________ _______ ________ ______
20.16.4.16 13.9 20.5.19 20.22
______________ ____________________
21.1.14.21.16 14.16.13.2.19.5.
(Salmo 103:1)
Escribe Salmo 103:13
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4.- Mira el salmo 103:3-5 y completa lo que Dios hace: (sana, corona, rescata, perdona, rejuvenece, sacia)
El es quien ___________________ todas tus iniquidades. El es quien ____________ todas tus dolencias. El es quien ___________ del hoyo tu vida. El es quien te _________________ de favores y misericordias. El es quien _______________ de bien tu boca. El es quien te ________________ como el águila
¿De quién recibimos todo lo bueno? ___________________________
Sigue completando el salmo 103:6
(misericordioso, misericordia, justicia, clemente, derecho, ira
Jehová es el que hace J________________ y D____________________ a los que padecen violencia. M _________________ y C______________ es Jehová, lento para la iI ______________ y grande en M _______ ____________________
• Según esto ¿Quién hace justicia?
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Si Dios es misericordioso y clemente para con nosotros, ¿Cómo tenemos que ser nosotros para nuestro prójimo?